216. Año 18, agosto 08

Editorial. El concepto maya de “desarrollo” frente a los modelos socioeconómicos regionales, siglos XVI-XXI

El CIESAS y el IFAI. El 5 de junio de 2008, el Instituto Federal de Acceso a la Información Pública (IFAI) entregó al H. Congreso de la Unión su quinto informe...
Programa Internacional de Becas de Posgrado para IndígenasFundación Ford-CIESASBecarios 2008
Archivo Histórico del Agua Comisión del Papaloapan, presa Presidente Alemán y desplazamiento de población
  • Rights in RebellionLos seminarios de Antropología Jurídica y de Género y Etnicidad invitan a la presentación del libro Rights in Rebellion
  • Desacatos 27El Coloquio de Historia y Arqueología de la Mixteca del CIESAS invita a la presentación de Desacatos. Revista de Antropología Social, núm. 27 con el tema Arqueología y etnohistoria de la mixteca.
Novedades Editoriales. Reconociendo al pasado. Miradas históricas sobre Oaxaca Daniela Traffano (coord.)Oaxaca, UABJO, CIESAS, 2008
PNPC y la formación de antropólogos en México La Red Mexicana de Instituciones de Formación de Antropólogos (Red-MIFA) se reunió en marzo pasado en las instalaciones del CIESAS-DF (veáse Ichan Tecolotl, núm. 213, mayo, 2008, p. 7).

Editorial

El concepto maya de “desarrollo” frente a los modelos socioeconómicos regionales, siglos XVI-XXI
Esta propuesta de investigación fue planteada por un grupo de investigadores del CIESAS-Peninsular atendiendo a una de las demandas estipuladas en la convocatoria del Fondo Mixto del Estado de Yucatán, y se derivó de los resultados de un proyecto anterior concluido en 2006 denominado Espacios de Reproducción Cultural y la Reproducción Histórica de la Marginalidad Indígena en Yucatán, Siglos XVI-XXI. Este proyecto analizó el vínculo histórico entre la condición étnica de la sociedad maya yucateca y su situación de permanente pobreza y marginalidad social y económica.
Los datos cuantitativos muestran que ser indio significa un riesgo socioeconómico, pues los grupos indígenas son los más pobres entre los pobres y la mayoría de las políticas públicas aplicadas no han cambiado esta situación. Esto indicaría que la diferencia cultural desempeña un papel importante y requiere ser considerada en los estudios sobre desarrollo. La situación que viven los mayas de Yucatán está inserta en una espiral de marginación, haciendo que los términos “gente maya” y “pobre” sean considerados como sinónimos, produciendo dicotomías como lo “tradicional” y lo “moderno” o “pobreza” versus “desarrollo”, donde los primeros términos se relacionan con la población maya.
El proyecto se propone explicar una paradoja: en el transcurso de su historia, los mayas han sido la principal fuerza laboral en la construcción del desarrollo económico y de la creación de riqueza en el ámbito regional y, sin embargo, este pueblo ha permanecido prácticamente excluido de los beneficios de ese desarrollo. Así, al aportar su trabajo los mayas han sido parte fundamental de la misma estructura económica y social en la que se articulan desde los milperos hasta los asalariados, pero en la distribución del producto social –y por ende del consumo–, la mayoría de la población maya-hablante queda por debajo de los criterios codificados y legal y socialmente aceptados para calificar una vida digna: el salario mínimo, la escolaridad básica y el acceso a servicios de salud y vivienda, por citar los más básicos. Lo más grave es que tampoco los mayas que se mantienen en la esfera de la economía de autoconsumo y en la vida “tradicional” encuentran posibilidades para el desarrollo de su propia cultura y formas de vida. Para entender esta paradoja se requiere un análisis de largo plazo que permita la revisión de los distintos modelos socioeconómicos impuestos en la región –que en términos muy generales se pueden sintetizar desde la Conquista en un proyecto señorial imbricado con un incipiente desarrollo mercantil, un modelo de desarrollo articulado en torno de la hacienda agroexportadora y una situación más reciente de modernización económica capitalista– y vincular estos modelos con la situación de los mayas como actores sociales así como sus respuestas organizadas frente a estos cambiantes contextos.
El objetivo principal del proyecto es el análisis de la compleja relación existente entre la idea que los mayas tienen de su propio desarrollo y los contextos variables de modelos socioeconómicos en los que han estado insertos, con objeto de proponer estrategias encaminadas a lograr la congruencia que debe existir, por un lado, entre la dinámica propia de la sociedad y de la cultura maya y, por otro, de los modelos, políticas públicas y proyectos dirigidos a este importante segmento de población del estado de Yucatán. La investigación incluye también la identificación de grupos organizados (productivos, culturales, religiosos, gremiales y otros) para valorar su incidencia en acciones que busquen revertir situaciones de pobreza y marginalidad, y que refuercen la identidad del pueblo maya. Asimismo, al considerarse a la educación pública como un motor básico del desarrollo, se analizan las causas del bajo rendimiento escolar.
Uno de los problemas más recurrentes al planificar políticas de combate a la pobreza es el patrón disperso de asentamiento de la población con mayor grado de marginalidad y pobreza que dificulta el acceso a los servicios básicos de educación, salud y bienestar. Pero es necesario resaltar el hecho de que, de manera creciente, los mayas han migrado a entornos urbanos, en gran parte impulsados por la percepción generalizada de que para dejar de ser pobre y marginado primero se debe dejar de ser maya. Esta población maya urbana no existe para quienes planifican las políticas públicas.
Aunque la idea del desarrollo se ha planteado de diversas maneras (la “modernización”, la “dependencia”, la “crítica de la dependencia” o el “desarrollo desigual”), la noción generalizada ha sido lineal al plantearlo como un proceso permanente y acumulativo. Esta noción generalizada se imbricó bien con la tendencia integracionista del indigenismo, pero a partir de la década de los ochenta se fue dejando de lado para sustituirla por lo que se ha dado en llamar etnodesarrollo, que incorporó al concepto la dimensión cultural. Pero uno de los problemas de esta propuesta radica en que implica una representación de los indígenas como habitantes de comunidades más bien aisladas con economías de subsistencia y muy limitada interacción con el mercado, con lo que deja de lado la pobreza indígena urbana y la participación de los indígenas en los mercados de trabajo y de productos. De manera que se impone la revisión de la noción misma del desarrollo con el fin de no ofrecer solamente el impulso de las capacidades de los pueblos indígenas para que enfrenten y participen en “el proceso de desarrollo”.
Al ser el desarrollo un concepto esencialmente dinámico, el proyecto se funda en una necesaria revisión del contexto histórico de la sociedad maya en el largo plazo para ubicar las pautas generales de su desarrollo. A la llegada de los españoles había una numerosa población con niveles de organización que le habían permitido generar una compleja sociedad y cultura, así como producir un volumen importante de excedentes para sostenerlas. La economía se centraba en la producción de maíz y otros cultivos que se complementaba con la pesca, producción de sal y cacería. El intercambio comercial permitía el acceso a diversos productos. A pesar de la fragmentación política, la civilización maya mantenía vigentes sus principales logros culturales.
La Conquista española transformó a la sociedad maya imponiendo a su población la denominación de indígena, un término que implica la subordinación y la discriminación cultural. Su trabajo organizado se convirtió en la principal fuente de riqueza para los conquistadores, ante la falta de otras fuentes como las minas y las tierras propicias para cultivos comerciales. Se registraron cambios drásticos pues los señoríos fueron desarticulados y la población nativa quedó integrada en más de doscientos veinte repúblicas indígenas, precedentes de los municipios contemporáneos, donde se instauró el cabildo en el marco de una política estatal de separación o segregación pero que otorgó capacidad de gestión a los dirigentes de cada pueblo. En el ámbito económico, los mayas se integraron al régimen colonial por medio de la tributación, los servicios personales y los repartimientos, como mecanismos de aprovechamiento de su trabajo organizado. Pero en el ámbito del desarrollo cultural mantuvieron importantes espacios de expresión, especialmente porque su lengua se mantuvo y se convirtió en la lengua franca por su uso generalizado. Aprendieron a escribir en caracteres latinos la lengua maya, lo que les permitió mantener el registro de su historia, de sus conocimientos médicos y literarios y de una parte importante de su cosmovisión. El lenguaje escrito medió también su relación con las autoridades, especialmente en cuanto a los mecanismos de impartición de justicia.
El desarrollo de la sociedad maya de Yucatán registró importantes cambios a partir de mediados del siglo XVIII, como resultado de políticas inspiradas en el pensamiento liberal que marcaron un giro radical de la segregación al integracionismo. Se enajenaron tierras baldías para impulsar el crecimiento de la agricultura y la ganadería empresarial, se desamortizaron los bienes corporativos, se canceló el sistema de la encomienda y perdió fuerza el mecanismo de los repartimientos, lo que tendió a debilitar el control ejercido por cabildos y caciques. Numerosos habitantes de los pueblos se fueron a radicar a los asentamientos de haciendas como jornaleros o arrendatarios y se multiplicaron pequeños asentamientos humanos en el contexto rural, una característica observable aún en la actualidad yucateca.
La Independencia y la construcción de México como nación durante el siglo XIX acentuaron las transformaciones de la sociedad maya, por la política general de la desamortización de corporaciones civiles, como eran los pueblos, y por la ciudadanización de la población indígena. La colonización de baldíos y el desarrollo de las haciendas generaron oposición y fueron causa, entre otras, del grave conflicto social conocido como la Guerra de Castas. Otros cambios que afectaron a los mayas fueron la cancelación del uso legal de su propia lengua y su desplazamiento de los cargos en cabildos y juntas municipales, que afectaron también negativamente los acervos culturales y políticos de la sociedad maya. Al término del siglo xix casi la mitad de esta población habitaba en las haciendas, transformadas en agroindustrias del henequén, y en los pueblos se estrecharon las posesiones comunales o ejidales.
El siglo XX fue de mayores transformaciones todavía. El integracionismo marcó la política impulsada por los gobiernos en su relación con las sociedades indígenas después de la Revolución Mexicana y su eje primordial de desarrollo fue la educación pública en español. Se privilegió la exaltación de la historia nacional y se dejó de lado el acervo de conocimientos derivados de la cultura maya que permaneció socialmente estigmatizada y ajena al “desarrollo civilizatorio”. La educación bilingüe ayudó al proceso integrador. La modernización de las últimas décadas de este siglo ha generado un tipo de integración socioeconómica que conjuga diversos procesos que se complementan necesariamente: a) la desincorporación de decenas de miles de ejidatarios del crédito agrario (literalmente su desocupación), b) el desarrollo de ciudades y zonas turísticas en la costa Caribe, c) el impulso a la industria maquiladora, d) el crecimiento de la infraestructura, e) la urbanización de la población rural y el consiguiente crecimiento urbano acelerado, f) el desarrollo de movimientos migratorios (permanente y estacional) y g) el desplazamiento laboral cotidiano que implica largas distancias. Al observar los avanzados procesos de modernización socioeconómica de la península yucateca, estamos frente a un resultado histórico de larga duración, que se inició con el descubrimiento y la Conquista. Si bien las condiciones del medio geográfico y de los recursos naturales sin duda han impactado a la sociedad –con el cultivo de maíz, algodón, caña de azúcar y henequén, explotación de palo de tinte y de maderas preciosas, cultivo y extracción de la sal, entre otras actividades–, la sociedad maya es la condición básica que ha permitido, con su esfuerzo casi en nada compensado, la consolidación de la península yucateca como una región.
Pero es importante señalar que tanto la segregación colonial como el integracionismo posterior constriñeron a los portadores de la cultura maya al ejercicio de su riqueza cultural en el ámbito estrictamente local, sin facilitar el intercambio con el exterior y limitando las posibilidades de desarrollo. La pérdida de la escritura en su propia lengua fue una desventaja al reforzar el aislamiento y contribuir al deterioro de los mecanismos de supervivencia cultural. La castellanización forzada, pero incompleta, despojó a los mayas de buena parte de sus bases conceptuales sin brindarles los adelantos del conocimiento universal.
El grupo de trabajo de este proyecto de investigación lo conforman cinco investigadores del CIESAS-Peninsular y una de investigadora de la Universidad Autónoma de Yucatán. Quien esto escribe, así como la Dra. Laura Machuca y la Dra. Paola Peniche, realizan análisis de diversos aspectos históricos, el Dr. Jesús Lizama y la Dra. Violeta Guzmán hacen lo propio con temáticas contemporáneas, en tanto que el Dr. Pedro Bracamonte aborda cuestiones tanto históricas como actuales. Cuatro tesistas de licenciatura colaboran asimismo en el proyecto.
En junio de este año se concluyó la aplicación de la Segunda Encuesta sobre marginación, pobreza e identidad del pueblo maya de Yucatán (Empimaya), a una muestra de mil ciento cincuenta jefes de familia distribuidos en quince municipios. Los primeros datos agregados confirman los resultados de la primera encuesta realizada en 2004 y hacen énfasis en dos tendencias: el dinámico proceso del desplazamiento lingüístico y la creciente terciarización del empleo de los mayas. Por otra parte, en julio comenzó el levantamiento de la Encuesta sobre migrantes permanentes mayas en la ciudad de Mérida a una muestra de trescientos ochenta jefes de familia, con el objetivo de evaluar los cambios socioeconómicos, lingüísticos y culturales de la población maya que llegó a radicar en esa ciudad en las últimas cuatro décadas. Los resultados de estas encuestas serán difundidos en el Observatorio de seguimiento y análisis de las condiciones de vida del pueblo maya de la Península de Yucatán en el sitio web de la sede Peninsular del ciesas que se inaugura en septiembre. Seis artículos y capítulos de libro quedan como los primeros productos analíticos del proyecto. Asimismo, están en preparación los primeros dos volúmenes del cedulario de la colonización española en Yucatán.


Dra. Gabriela Solís Robleda
Investigadora del CIESAS-Peninsular

Puntos de Encuentro

El 9 de julio pasado el Dr. Robert Blake y la Dra. Elvira Sánchez de la Universidad de Cornell (Ithaca, Estados Unidos) hicieron una visita al ciesas-Sureste para acordar la realización de actividades conjuntas dentro del Programa de Estudios Latinoamericanos de esa universidad, que actualmente dirige el Dr. Blake. El programa incluye un curso de revisión panorámica de la investigación en una región de Latinoamérica y un recorrido por la misma región para establecer contacto con comunidades, instituciones y organizaciones. En esta ocasión se ha seleccionado a Chiapas como esa región de interés. Por ello, el CIESAS-Sureste ha sido invitado a participar en este curso multidisciplinario con dos actividades: una videoconferencia en la que muestre el trabajo de la Institución en las diversas líneas de investigación (el viernes 14 de noviembre de 2008, transmitiendo desde la Unidad Sureste); y la recepción en esa sede del grupo de estudiantes y profesores de esta universidad, para conversar acerca de los diversos proyectos de investigación en marcha (el 12 de enero de 2009).

Definitividad

Nos congratulamos en informar a la comunidad del CIESAS que, la Comisión Académica Dictaminadora, en su sesión del 7 de julio de 2008, sugirió a la Dirección General del CIESAS la contratación definitiva como investigadora de la Dra. Laura Olivia Machuca Gallego, quien estará adscrita a la Unidad Peninsular.La investigadora se desempeñó previamente por cuatro años en esa sede, contratada por tiempo determinado.
La Dirección General del CIESAS le extiende un reconocimiento a esta destacada académica por sus logros dentro de nuestra Institución y la felicita por este merecido apoyo a su carrera como investigadora social.

El CIESAS y el IFAI

El 5 de junio de 2008, el Instituto Federal de Acceso a la Información Pública (IFAI) entregó al H. Congreso de la Unión su quinto informe, a través del cual da a conocer las actividades que durante 2007 realizó en colaboración con las Unidades de Enlace del Gobierno Federal para garantizar y promover el ejercicio del derecho de acceso a la información pública y la protección de los datos personales. En el informe se refleja el cumplimiento del ciesas con las siguientes acciones:
Mantener la evaluación de 100% en cumplimiento de las obligaciones de transparencia establecidas en el artículo 7 de la Ley;
Estar dentro de las ciento veintinueve de las doscientas cuarenta dependencias y entidades de la APF que notificaron contar con criterios específicos en materia de protección de datos personales;
Dar respuesta a las solicitudes de información en un tiempo promedio de 7.6 días hábiles;
Atender cincuenta y dos solicitudes de información y sólo haber generado un recurso de revisión, lo que equivale a 1.9%;
Estar dentro de las ciento treinta y tres de las doscientos cuarenta dependencias y entidades de la APF, que demostró haber resuelto todas sus negativas de Acceso a la Información por Inexistencias a través del Comité de Información;
Ser el Centro Público de Investigación del Conacyt que tuvo más consultas públicas, a través del Portal de Obligaciones de Transparencia, con un total de 11 339 veces durante el año.

Se agradece la estrecha colaboración de las Unidades Administrativas del CIESAS con la Unidad de Enlace por haber logrado estos resultados.
Lic. Rosa María Rivas Rangel
Coordinadora de Archivo y Titular de la Unidad de Enlace
uenlace@ciesas.edu.mx

Docencia

Programa Internacional de Becas de Posgrado para Indígenas
Fundación Ford-CIESAS
Becarios 2008
Resultados de los estudiantes admitidos en el programa
En julio pasado fueron seleccionados los treinta becarios indígenas de la promoción 2008 del International Fellowships Program (IFP-México). Este año participaron ciento sesenta y tres solicitantes de veitisiete grupos indígenas provenientes de diecisiete estados de la República Mexicana. Los becarios deberán iniciar sus posgrados en el transcurso de 2009.


Grado: M= Maestría D= Doctorado
La Coordinación del IFP-CIESAS trabajará conjuntamente con los becarios en el diagnóstico de sus necesidades de nivelación académica y en la identificación y elección definitiva de sus programas de estudio. La próxima convocatoria del IFP-México se abrirá en enero de 2009.

Archivo Histórico del Agua

Comisión del Papaloapan, presa Presidente Alemán y desplazamiento de población
El principal objetivo de este trabajo es mostrar la importancia de la documentación del fondo de la Comisión del Papalopan, resguardado en el Archivo Histórico del Agua, así como también invitar al investigador a conocer las diversas temáticas que se pueden abordar mediante la consulta de los expedientes que resguarda dicho archivo. El presente texto pretende describir, muy someramente, el impacto que tuvo uno de los proyectos más ambiciosos de la Comisión del Papalopan: la construcción de la Presa Presidente Alemán.
Ubicación geográfica de la cuenca del Papaloapan
La cuenca del Papaloapan comprende una superficie de 45 540 kilómetros cuadrados y está integrada por los estados de Oaxaca (que abarca 163 municipios), Veracruz (64 municipios) y Puebla (11 municipios). Su topografía es muy accidentada, y en ella se destacan las pendientes del Citlaltepetl o Pico de Orizaba. En lo referente a su hidrografía se compone de nueve ríos principales y de un número importante de corrientes subsidiarias: río Grande o Alto Papaloapan, río Salado, río Santo Domingo, río Valle Nacional, río Tonto, río Obispo, río Tesechoacán, río San Juan Evangelista y río Blanco. Presenta una extensa variedad de climas, que van de cálidos extremosos a climas benignos o templados. Se cultiva principalmente el maíz, caña de azúcar, café, frijol, trigo, arroz, tabaco, piña, haba y malta, demás de contar con la cría de ganado ovicaprino, porcino, equino y avícola.
Creación y objetivos de la Comisión del Papaloapan
La Comisión del Papaloapan (1947-1986), se creó con el fin principal de promover el desarrollo integral de todos los recursos existentes en aquella zona y evitar desastres ocasionados por las inundaciones. Para lograrlo se realizaron estudios encaminados a conseguir la regulación de crecientes y fomentar el desarrollo integral a largo plazo. Uno de los motivos que originaron la creación de dicho organismo fue apoyar a las poblaciones localizadas en la cuenca del Papaloapan, las cuales habían permanecido al margen del progreso nacional debido a los constantes desbordamientos del río Papaloapan. Esta falta de seguridad, atraso técnico y carencia de comunicaciones en la región, se conjugaron para reducir al mínimo las condiciones de vida prevalecientes de los habitantes asentados en la cuenca del río.
Las actividades iniciadas por la Comisión estaban las campañas de salud y saneamiento, prevención de inundaciones, educación, construcción de carreteras, reforestación, riego, colonización, crédito agrícola, producción de energía eléctrica, obras de agua potable y alcantarillado, fomento de comunicaciones, desarrollo urbano y agrícola con la creación de distritos de riego, de temporal, de drenaje y agropecuarios. Cabe aclarar que la mayoría de estas obras se realizaron durante las gestiones de los presidentes Miguel Alemán y Adolfo Ruiz Cortines.
La parte esencial del programa, que pretendía establecer la Comisión del Papaloapan, era la construcción de dos grandes presas para la regulación de crecientes y protección contra las inundaciones: la presa Presidente Alemán (1949-1955), en el río Tonto y la presa Cerro de Oro, en el río Santo Domingo. Con la ejecución de estos proyectos se tenía la intención de dar un gran impulso al desarrollo agrícola; asimismo, el proyecto llevó a cabo un proceso de reacomodo de aproximadamente tres mil familias indígenas del vaso de la presa y cerca de quinientas familias de colonos; esto último se realizó mediante la aplicación de un programa de incorporación de nuevas tierras al cultivo y de colonización.
La presa Presidente Alemán y el desplazamiento de población
En 1949 se inició la construcción de la presa Presidente Alemán y una vez terminada dejó bajo el agua la superficie de tres municipios, ubicados en el estado de Oaxaca: San José Independencia, San Miguel Soyaltepec y San Pedro Ixcatlán. Los habitantes desplazados, en su mayoría, eran indígenas mazatecos y en menor número chinantecos, ganaderos y mestizos.
Sus tierras estaban distribuidas en parcelas ejidales o en pequeñas propiedades, por lo que el gobierno federal se vio en la obligación de indemnizar a los habitantes afectados mediante el pago en efectivo o en ocasiones con la entrega de terrenos en otras zonas. Para este fin se creó la Oficina de Reacomodo de Población, que trabajó en conjunto con el Instituto Nacional Indigenista (INI); de esta manera, se iniciaron las “brigadas de convencimiento a las poblaciones del vaso”, y los habitantes de esa zona fueron reacomodados en cinco zonas: Soyaltepec, Los Naranjos, La Joya del Obispo y Cihualtepec en Oaxaca, así como en Yogopi, en Veracruz. Las personas reacomodadas recibieron tierras, casa y solar urbano en la nuevas aldeas construidas por la Comisión del Papaloapan; además contaban con las herramientas y animales trasladados de las poblaciones inundadas. Con el pago de sus propiedades afectadas y la concesión de préstamos para cultivos, se crearon veinte centros de población y se construyeron dos mil ochenta casas.
El trabajo de reacomodo duró seis años de 1953 a 1959; sin embargo, no fue terminado totalmente, ya que todavía en 1967 se encontraban algunas familias desplazados en busca de una localización definitiva, en tanto otras aún esperaban el pago de indemnización. De las familias del vaso unas tres mil fueron trasladadas por medio del reacomodo oficial. El resto se asentó por su propia cuenta en otras tierras situadas cerca de la presa o en otras regiones.
Sería interesante dar un seguimiento al desarrollo que tuvieron esos nuevos centros de población, pues sin duda en ellos se gestaron un sin fin de diversidades en lo referente al plano económico y social. En algunos poblados sus habitantes se adaptaron a la agricultura comercial y en otros siguieron con los métodos de la agricultura de subsistencia e incluso algunos pobladores abandonaron sus nuevas tierras. La calidad de la tierra fue también un factor que hizo la diferencia para conseguir un buen desenvolvimiento de los habitantes reubicados, ya que en ocasiones se presentaron variaciones tanto en la calidad como en la cantidad de dotación.
La construcción de la presa Presidente Alemán fue uno de cinco proyectos de construcción para regular de modo absoluto las corrientes del Papaloapan, por lo que los casos de reacomodo se presentaron en los proyectos de Cerro de Oro y Quiotepec, en el río Santo Domingo; Cerro Frío en el río Cajones y muy pequeñas movilizaciones en las presas de los afluentes del río San Juan Evangelista.
Lic. Ivett Verónica García Arenas
Catalogadora del Archivo Histórico del Agua
israel.sandre@cna.gob.mx

Presentaciones Editoriales

Rights in Rebellion
Los seminarios de Antropología Jurídica y de Género y Etnicidad invitan a la presentación del libro Rights in Rebellion. Indigenous Struggle and Human Rights in Chiapas, de la investigadora Shannon Speed. Participarán las doctoras Sylvia Marcos, Márgara Millán (UNAM) y María Teresa Sierra (CIESAS-DF). Moderará la sesión la Dra. Aída Hernández (CIESAS-DF). La cita es el jueves 14 de agosto de 2008 a las 17:00 h en la Sala Juárez del ciesas-df, ubicado en Juárez 87, Col. Tlalpan, México, D. F.

Desacatos 27
El Coloquio de Historia y Arqueología de la Mixteca del CIESAS invita a la presentación de Desacatos. Revista de Antropología Social, núm. 27 con el tema Arqueología y etnohistoria de la mixteca. Participan. Dra. Laura E. Sotelo Santos (IIFL-UNAM), y Dr. Michel Oudijk (IIFL-UNAM). Modera: Dr. Manuel Hermann (CIESAS-DF). Martes 26 de agosto de 2008 a las 18:00 h en el Auditorio del CIESAS-DF, Juárez 222, col. Tlalpan, DF.

Novedades Editoriales

Reconociendo al pasado. Miradas históricas sobre Oaxaca
Daniela Traffano (coord.)
Oaxaca, UABJO, CIESAS, 2008
ISBN: 978-968-496-664-2


En 2003 el Instituto de Humanidades de la Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca coordinó un seminario de discusión titulado Historia, Sociedad y Literatura de Oaxaca. Nuevos Enfoques.La Unidad Pacífico Sur del ciesas relevó a sus promotores comprometiéndose en la gestión de otra temporada de debates. Así, entre 2004 y 2005, las reuniones siguieron en el ámbito de un seminario titulado De Historia, Etnohistoria y Afines. Los encuentros tuvieron como objetivos mantener vivo y abierto un espacio de discusión académica para las ciencias sociales y garantizar un flujo de información en movimiento constante, relativo a las investigaciones que se llevan a cabo sobre y en Oaxaca. El seminario abrió sus puertas a propuestas de estudios, informaciones sobre archivos así como a trabajos en vía de conclusión que fueron presentados por académicos de distintas disciplinas (historia, antropología, sociología, arqueología). El libro que se propone recoge sólo algunas de las aportaciones al debate, específicamente aquellas de carácter histórico, que se presentan organizadas en cuatro secciones, ordenadas cronológicamente, cubriendo un arco temporal que va desde la época colonial hasta el siglo XX.

PNPC y la formación de antropólogos en México

La Red Mexicana de Instituciones de Formación de Antropólogos (Red-MIFA) se reunió en marzo pasado en las instalaciones del CIESAS-DF (veáse Ichan Tecolotl, núm. 213, mayo, 2008, p. 7). En ella, la Red acordó aceptar la invitación del Dr. Luis Ponce Ramírez, director de Desarrollo de Científicos y Tecnólogos del Conacyt, para proponer los mejores indicadores de calidad de los posgrados en antropología. Los directivos de docencia de las veinte instituciones representadas en esta agrupación discutieron el asunto y acordaron crear una comisión para elaborar de un documento de reflexiones. Esta comisión fue integrada por los investigadores Andrew Roth (Colmich), Florencia Peña (ENAH), Raúl Nieto (UAM-I) y Roberto Melville (CIESAS-DF).
El texto, revisado por los representantes de las instituciones que conforman la Red, fue firmado por la presidencia en turno, a cargo de la Dra. Patricia Torres Mejía, subdirectora de Docencia del CIESAS y por la coordinadora del Proyecto Antropología de la Antropología (Adela), Dra. Ana Paula de Teresa, profesora del Departamento de Antropología de la UAM-I.
Las líneas siguientes reproducen el documento completo enviado al Dr. Ponce Ramírez con siete propuestas sobre las formas de evaluación de los posgrados en antropología.
Reflexiones en torno a los criterios del PNCP
y la evaluación de los posgrados en antropología.
Introducción
La Red Mexicana de Instituciones de Formación de Antropólogos (Red-MIFA) reúne en la actualidad a veinticuatro de las veintiséis instituciones públicas y privadas que imparten licenciaturas o posgrados en la disciplina a nivel nacional. Hoy, la Red-MIFA sintetiza el trabajo serio y comprometido, así como los esfuerzos solidarios que desde el 1 de diciembre de 2000 se han desarrollado con el fin de construir un espacio de intercambio de experiencias sobre la docencia de esta área, mismos que se concretaron nuevamente en la XV Reunión de la Red-MIFA, celebrada en el Centro de Investigaciones y Estudios Superiores en Antropología Social, sede México, el 6 y 7 de marzo del año en curso. Creemos que en México esta Red, única en su género, constituye un espacio de reflexión y elaboración de propuestas nacionales sobre la enseñanza-aprendizaje de la antropología.
A las reuniones semestrales asisten los responsables y representantes de los programas de antropología de todo el país, en cuyo seno se está llevando a cabo desde 2007 un proyecto de investigación de análisis crítico de la institucionalización de la antropología y su enseñanza en México, que sistematiza y analiza los datos cualitativos y cuantitativos de las instituciones de la Red, titulado Antropología de la Antropología (consúltese
www.uaemex.mx/pwww/ant/ y www.adelaredmifa.org).
A esta XV Reunión asistió como conferencista magistral el director del Posgrado del Conacyt, Dr. Luis Ponce, quien nos abrió la posibilidad de emitir como Red nuestra opinión sobre los criterios de evaluación de los posgrados, invitándonos a hacer presencia y emitir propuestas en los foros de pares que se convocarán en mayo, invitación que la Red decidió aceptar.
La institucionalización de la docencia en antropología tiene apenas setenta años (desde 1938 a la fecha) y durante varias décadas a través de una sola dependencia: la ahora Escuela Nacional de Antropología e Historia, seguida de la Universidad Veracruzana (1959) y la Universidad Autónoma de Yucatán (1966). Hasta muy recientes fechas otras instituciones de educación superior han abierto alguna carrera antropológica, diversificando la oferta y las opciones a nivel nacional, tanto de licenciaturas, como de posgrados, de lo cual nos congratulamos. Sin embargo, a pesar de esta dinámica, es innegable que la antropología mexicana ha ganado un lugar tanto en el contexto nacional como internacional por sus importantes contribuciones académicas y la generación de visiones novedosas, así como por sus vínculos y compromisos con los grandes problemas nacionales y el análisis de su impacto en los sectores sociales menos favorecidos. Por tanto, la Red-MIFA considera importante que se tomen en cuenta las especificidades de la disciplina en el país, así como sus tradiciones y su identidad nacionales, en el momento de evaluar sus posgrados, para lo cual ha preparado el siguiente documento conjunto, que reúne las experiencias y el punto de vista de las veinticuatro escuelas que la integran. Presentaremos siete propuestas concretas para cambios en los parámetros de evaluación de los posgrados en antropología, así como siete reflexiones más a fondo sobre la naturaleza de la antropología como la disciplina más humanista de las ciencias y la humanidad más científica.
Siete propuestas
1. Los programas de posgrado en México tienen que responder a los problemas todavía no resueltos de la educación básica y universitaria, tales como a) la heterogeneidad de los programas educativos, tanto en sus materias como en sus formas de evaluación y graduación; b) se recurre en la educación media y superior a tareas de repetición y de paráfrasis que hacen que, en muchos casos, los estudiantes difícilmente logren hacer una síntesis de un texto original con sus propias palabras, c) se da demasiada importancia al desempeño oral sin fortalecer la formación basada en la lectura y la escritura, y d) una educación memorística, que no fomenta el análisis y la síntesis en un nuevo pensamiento de textos y posturas distintas, vital para la investigación antropológica.
Los posgrados en antropología, además de la formación especializada, deben desarrollar acciones que subsanen estas deficiencias en sus alumnos, por lo que los requisitos del Conacyt en tiempos de terminación de estudios y titulación entran en contradicción con esta realidad nacional. Además, esta especificidad debe ser tomada en cuenta en la selección de programas de posgrado en el extranjero para la comparación con los programas de México. Necesitamos identificar los países en donde las relaciones de la educación básica y universitaria con la educación a nivel de posgrado compartan logros, problemas y necesidades semejantes. Éstas no necesariamente son las universidades europeas, canadienses o norteamericanas, cuya infraestructura, recursos para la docencia, ingresos de sus profesores y financiamientos a las actividades de investigación de su planta docente, etc., no son comparables con nuestro contexto mexicano.
2. Existe una gran variabilidad en las licenciaturas, y muchos solicitantes de ingreso a posgrados de antropología vienen de disciplinas afines. Ambos factores hacen problemática una asociación estrecha entre la selección de estudiantes y la eficiencia terminal. Por ello se sugiere un periodo de gracia al inicio del programa, de seis meses, no utilizado en el cálculo de la eficiencia terminal.
3. Debe distinguirse entre la política de becas para fortalecer áreas de la ciencia y las tasas de graduación, que deben ser evaluadas en torno a las tendencias reales en los programas de posgrado nacionales e internacionales de acuerdo con las áreas de las ciencias. Por ejemplo, usar el criterio de una tasa de graduación de cuatro años y medio o menos para calificar un programa como de “competencia internacional” es confundir una política de eficacia terminal en el otorgamiento de becas Conacyt, con la evaluación de la calidad académica de un programa.
Debe tomarse en consideración que para la formación de los alumnos las tesis antropológicas, tanto en la maestría como en el doctorado, idealmente deben basarse en el trabajo de campo. Así, el tiempo de planeación y ejecución de la investigación de campo, más el trabajo que reclama la transcripción, sistematización y análisis de los datos obtenidos, es mayor que el que se calcula para tesis propias de las ciencias “duras” o realizadas en un laboratorio. Por tanto, proponemos medir la eficiencia terminal no por cohortes, sino por el acumulativo de la matrícula a través del periodo del programa evaluado.
4. Proponemos flexibilizar el cálculo de las tasas de graduación mediante fórmulas que establezcan una media de tiempo con un margen de variación, por ejemplo, para una maestría 2.5 años +/- 0.5 años y un doctorado 4.5 años +/- 1.0 año.
5. La participación de los estudiantes con los investigadores en la antropología no debe ser evaluada con los mismos criterios de las publicaciones de ciencias de laboratorio, donde la norma es coautoría de todos los integrantes del proyecto, sino que la participación se registre mediante I) publicaciones editadas que incluyan capítulos de estudiantes, II) publicaciones resultantes de trabajos de tesis y III) la participación de estudiantes en las revistas con arbitraje publicadas por sus instituciones.
6. La antropología corresponde tanto al área de Humanidades y Ciencias de la Conducta como al área de Ciencias Sociales, por tanto, en la evaluación de programas de antropología por comités de pares se debe tomar en cuenta que esta disciplina se sitúa en la frontera entre ambas áreas.
7. El fortalecimiento del posgrado reclama una política complementaria de apoyo para que se subsanen las debilidades de los programas (tal como el Programa Institucional de Fortalecimiento Institucional –pifi– contempló). Así, el Conacyt debe fomentar y apoyar la creación de la infraestructura necesaria para la investigación y la docencia con bibliotecas actualizadas, suscripciones a revistas nacionales y extranjeras, suscripciones a bancos de datos y de revistas de texto completo, equipo de laboratorio, software para metodologías cualitativas, salas de cómputo, apoyos financieros para el trabajo de campo, etcétera.
También proponemos que se abran plazas para que las instituciones de enseñanza tengan el núcleo básico de ptc que exige, así como que se promueva con una política específica la oferta de contratación en las múltiples instituciones –públicas y privadas– donde los egresados podrán prestar sus servicios como investigadores, consultores, promotores de iniciativas culturales, etcétera.
Reflexiones finales
1. La diversidad en el estudio de la diversidad. Para su constitución y funcionamiento, la Red-mifa ha reconocido la diversidad de tradiciones académicas que caracterizan a la disciplina. Las comunidades antropológicas, asimismo, están alojadas en distintos tipos de instituciones: universidades públicas y privadas, centros y colegios de investigación, instancias gubernamentales y organizaciones no gubernamentales, centros públicos Conacyt, etc. Las variadas circunstancias socioeconómicas de lugares y regiones a los que prestan servicios nuestros programas, las escalas o tamaños de las instituciones (medidas por el número de profesores y alumnos, por ejemplo), su presupuesto de operación e infraestructura y la antigüedad institucional, entre otras cuestiones, las hacen muy heterogéneas. El diseño de los estatutos de la Red-mifa tomó en cuenta tales variables para crear un marco de referencia flexible y equitativo donde tiene cabida la diversidad, tratando de apoyar el desarrollo de las instituciones más débiles o de reciente creación. Deseamos contar con un procedimiento de evaluación por parte del Conacyt que también sea sensible a tal diversidad institucional de nuestros programas. No se trata de una sola secuencia del fortalecimiento del posgrado, sino de diversos derroteros de una aspiración general, con variable arraigo en contextos no homogéneos.
2. Las principales contribuciones de la antropología. A la forja de nuestra nación mexicana y por supuesto en diálogo con todas las otras disciplinas científicas, podrían enumerarse sucintamente: a) el reconocimiento valorado positivamente de los orígenes e influencia de una civilización antigua, b) la herencia y actualidad multicultural y plurilingüe (no sólo por la presencia de diversas culturas indígenas, sino también por las vigorosas influencias de las culturas europeas, del vecino del norte y del resto del continente), c) la caracterización multilineal del desarrollo y del progreso, d) las adaptaciones de las sociedades locales y regionales a variadas condiciones geográficas y climáticas dadas en el territorio nacional, e) el riesgo de la degradación ecológica y la vulnerabilidad social del avance económico y tecnológico, f) la perspectiva holística o integral apropiada para el análisis de los fenómenos socioculturales, y para evaluar y diseñar las políticas de intervención y cambio social, g) la sensibilidad y metodología para abordar los conflictos y movimientos sociales, y h) su contribución al análisis y elaboración de propuestas de los problemas a que se enfrentan los sectores menos favorecidos de la sociedad. Los antropólogos comparten con otros científicos algunas de estas contribuciones de nuestra disciplina; lo cual no es fruto de un desarrollo disciplinario aislado sino de un creciente diálogo interdisciplinario. La antropología, al igual que otras ciencias sociales, produce conocimientos “situados”. Las grandes generalizaciones están acotadas por contextos geográficos e históricos. Sus frutos (publicaciones, resultados de investigación) tienen “mercados” especializados y delimitados en el contexto nacional. Por lo que muchas veces es prioritario que el conocimiento antropológico se publique en México y en español.
3. La peculiaridad de los conocimientos antropológicos. A diferencia de otras ramas del conocimiento científico, donde el investigador es un observador entrenado y competente, pero no necesariamente involucrado en forma íntima con los fenómenos estudiados, en el caso de la antropología, es entrenado para moderar sus prejuicios sociales y culturales a la hora de acercarse a los grupos de estudio, para no dejarse influenciar por ellos, en la medida de lo posible. Deberá hacer un enorme esfuerzo por encontrar los términos de la comunicación con esos grupos, incluso el aprendizaje de un idioma. Es prácticamente reconocido por quienes han vivido esta experiencia, como un rito de pasaje, que el antropólogo no sólo va a producir un documento que se llama tesis de maestría o de doctorado, sino también experimenta un cambio tanto en sus formas de mirar a los otros como en sus formas de interacción con ellos. Esto implica la transformación de muchos de los valores morales y culturales en los que fue socializado en su país, clase o grupo étnico. Quienes tenemos contacto con los estudiantes, nos hemos dado cuenta cómo durante la elaboración de la tesis están lidiando no sólo con problemas metodológicos, conceptuales y teóricos, sino también con el choque de valores que se ha producido en el ejercicio y sus efectos en su personalidad más íntima. Esta experiencia transformadora, de singular importancia en la formación antropológica, es asimismo valioso ejercicio para la integración social y cultural de una sociedad no homogénea como la mexicana, y consecuentemente deberá ser reconsiderada en los criterios y tiempos de titulación del Conacyt.
4. La limitación de los criterios cualitativos vigentes. El problema fundamental que guardan los criterios vigentes en el pnpc es que son de tipo cuantitativo. Su limitación reside en pretender evaluar la calidad utilizando criterios cuantitativos, como son profesores en el núcleo básico, productos realizados, número de graduados y tiempos de graduación, coautorías con los alumnos, membresías en el sni, etc. Tales criterios cuantitativos son necesariamente indicativos. Resultan útiles para elaborar rankings, pero según nuestra experiencia resultan completamente inapropiados cuando se pretende evaluar con ellos la calidad de las ciencias sociales y las humanidades. Es insuficiente hacerlos más flexibles, como sugerimos arriba; es indispensable introducir indicadores cualitativos.
 odemos ofrecer como contraargumento convincente acerca de los índices de eficiencia (tiempos para obtener el grado) o tasas de graduación del alumnado que el mismo Conacyt envía a sus becarios al extranjero a universidades que en su mayoría no cumplen estos dos indicadores.
5. Acerca de los posdoctorados. Los posdoctorados son un recurso al que deben aspirar todos los egresados del doctorado; pero no deben considerarse como una forma de remediar doctorados cursados con premura, o con proyectos de muy corto aliento que necesitan del posdoctorado para concluirlos satisfactoriamente.
6. Criterios cualitativos. Necesitamos mejores indicadores de tipo cualitativo en lugar de simples indicadores de productividad. Los indicadores cualitativos más destacados para evaluar los programas de antropología son los siguientes: 1) nombramiento de asesores expertos en las líneas de investigación en los comités de tesis, 2) organización de coloquios para la presentación de proyectos, avances y resultados de las investigaciones de tesis, 3) líneas y programas de investigación innovadores, 4) fondos concursados y apoyos que se aplican en cada programa a los estudiantes de posgrado y a sus tesis, 5) estancias prolongadas de investigación de campo. En contraste, señalamos tres indicadores cuantitativos que resultan inapropiados: 1) el peso asignado a los tiempos para obtener el posgrado medido en años, 2) la identificación a priori de un número mínimo de personal de tiempo completo (ptc) que forma el núcleo académico básico de los programas, pues la relación debiera ser proporcional para establecer la suficiencia de la planta académica, 3) el perfil único de profesor-investigador en lugar de una evaluación del conjunto de profesores del departamento o programa.
7. Acerca del criterio de internacionalización de los programas. La vitalidad de la antropología contemporánea se ha desplazado hacia la investigación realizada en los países del sur. Hay una intensa búsqueda de interlocutores entre programas anclados en países periféricos, de tal suerte que los indicadores de la internacionalización en antropología se manifiestan explícitamente en la atracción de estudiantes de otros países que eligen a México para adquirir su formación antropológica.
Conclusión
Aspiramos a participar en un fecundo diálogo con los representantes de otras ramas de las ciencias y las autoridades del Conacyt acerca de los mecanismos más apropiados para asegurar el fortalecimiento de los posgrados y las modalidades para la evaluación de los programas que tomen en consideración los variados contextos de la enseñanza en México. El fortalecimiento de los posgrados y su evaluación es parte de un proceso más amplio y complejo que incluye la renovación de la educación preuniversitaria y el nivel de licenciatura. Por esta razón reiteramos nuestra opinión de que las comparaciones entre los posgrados nacionales con los extranjeros, sin tomar seriamente en cuenta los niveles educativos previos, las condiciones básicas de infraestructura y otras características, ya mencionadas, son engañosas y por lo tanto deben manejarse con cuidado.
Para justificar nuestra propuesta de flexibilidad y equidad en la aplicación de criterios, hemos puesto de relieve la juventud de la mayoría de los programas de antropología (licenciatura y posgrado), su concentración geográfica en el centro de México y su ausencia en el norte del país (salvo una licenciatura y una maestría en Chihuahua), la diversidad de contextos institucionales donde se alojan las comunidades de antropólogos, la diversidad de tradiciones antropológicas, las combinaciones de sus especialidades (antropología social, etnología, arqueología, antropología física y lingüística).
Nuestras propuestas se basan en la experiencia. La flexibilidad postulada apunta a aquellos aspectos donde la rigidez de la evaluación puede sofocar el esfuerzo de las comunidades de profesores y estudiantes, en lugar de alentarlo. Un ejemplo es la tendencia a usar la eficiencia terminal como supremo indicador de la marcha del programa, lo que deja al margen aspectos fundamentales en todo proceso educativo, tales como: las necesidades de los educandos, sus aspiraciones de empleo, las formas de la enseñanza de la disciplina respectiva y sus tiempos, así como los esfuerzos realizados por alumnos y profesores.
Como una organización representativa de la institucionalización de la formación de investigadores en la antropología ofrecemos estas reflexiones para contribuir crítica y propositivamente al proceso de establecimiento de tendencias reales para la evolución de posgrados de excelencia, quedando a sus órdenes para ampliar verbalmente estas ideas iniciales
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REvistas

Ethnography.com
La Dra. Alejandra Sánchez Vázquez, egresada del Doctorado en Antropología de la Universidad de Manchester –y antes de nuestra Maestría en Antropología Social del ciesas-df– me ha recomendado la visita y consulta de esta revista digital. Este blog de acceso abierto fue fundado por Paul E. Willis, autor de un libro titulado Learning to Labor: How Working Class Kids Get Working Class Jobs (Columbia University Press, 1981), cuya reseña puede localizarse y leerse en jstor [http://www.jstor.org/stable/2077050].
He seleccionado al azar y traducido la siguiente nota publicada en Ethnography.com que podría resultar de interés para los antropólogos mexicanos.
¿Traerá el presidente Obama una perspectiva antropológica a la Casa Blanca?
La declaración de Barack Obama acerca de la cuestión racial en Estados Unidos me dejó impresionado. Revelaba una sensibilidad acerca de la tolerancia, la raza y la cultura que uno suele escuchar en los seminarios académicos, en antropología por ejemplo, mas no en los discursos políticos en medio de una campaña electoral. Espero que Obama haya acertado al haber asumido que el pueblo americano está preparado para este enfoque de la cuestión.
Obama ha estado expuesto al pensamiento antropológico de una manera poco común. Su madre, Ann Dunham Soetoro, fue estudiante de antropología en la Universidad de Hawai y obtuvo el doctorado luego de haber hecho trabajo de campo durante cuatro años en Indonesia para elaborar la tesis Los herreros campesinos en Indonesia: sobreviviendo y saliendo adelante a pesar de todo, ¡de 1 067 páginas! (lo que me parece un exceso). Ella también trabajó para la aid y la Fundación Ford como antropóloga aplicada.
Además de haber vivido en Indonesia de los seis a los diez años, Obama regresó a Indonesia muchas veces para visitar a su madre que continuaba trabajando en aquel país. Aunque él no obtuvo ningún título en antropología, tengo la esperanza de que si se convierte en presidente, traiga consigo a la Casa Blanca una perspectiva más plural acerca de la cultura.
Tony Waters. Marzo 20 de 2008

Roberto Melville (CIESAS-DF)
Comentarios y sugerencias siempre son bienvenidos
en: melville.ciesas@yahoo.com

Maestría en Antropología Social. Generación 2007-2009

I Coloquio de Estudiantes. Presentación de preproyectos de tesis
ciesas-Pacífico Sur

El 25 y 26 de junio de 2008 se llevó a cabo el I Coloquio de la Maestría en Antropología Social del CIESAS Pacífico Sur.
Como para los demás programas del sistema de docencia del ciesas, el Coloquio representa un momento para el intercambio de ideas, discusión de hipótesis, y formulación de preguntas; asimismo se constituye como un espacio diseñado para compartir experiencias de investigación y de análisis.
Al evento asistieron directores de tesis y comentaristas de nuestra institución (colegas de las unidades Pacífico Sur, Occidente y Distrito Federal), y se contó con la participación de investigadores de otras instituciones nacionales y locales como el inah Oaxaca, la UABJO, la Universidad de la Sierra Juárez, la UNAM y la ENAH.
El Programa de Maestría está llegando al final de su tercer cuatrimestre y los diez estudiantes que integran esta primera generación saldrán a campo el próximo septiembre. Para eso, durante los dos días del Coloquio presentaron sus planteamientos y propuestas de investigaciones antropológicas sobre temas como justicia, territorio, migración, arte y sociedad, mujeres y programas gubernamentales, entre otros. Estas propuestas los llevarán a trabajar en distintas zonas del estado que incluyen la capital, la Mixteca, la Chinantla, el Istmo de Tehuantepec, la Mazateca, el Rincón, y la Sierra Norte.
Agradecemos la presencia al evento a todos los participantes, el apoyo del CIESAS y la participación de la Dra. Patricia Torres, subdirectora de Docencia de la Institución.
A continuación se presentan los proyectos que fueron discutidos.
Alumna: Violeta Zylberberg Panebianco
Proyecto de investigación: Prácticas estéticas y representaciones en la protesta y la resistencia en Oaxaca.
Directora: Dra. Catherine Héau Lambert (ENAH)
Comentarista: Dr. Sergio Navarrete (CIESAS-Pacífico Sur) y Dr. Fausto Diaz (IIS-UABJO)
Alumno: Francisco Leonardo Resendiz
Proyecto de investigación: El movimiento Street Art como estrategia comunicativa para una participación política alterna. El arte gráfico político en las calles del centro histórico de la ciudad de Oaxaca de Juárez.
Directora: Dra. María de los Ángeles Romero Frizzi (INAH Oaxaca)
Comentaristas: Mtra. Patricia Tovar (CIESAS-DF) y Mtro. Iván Arenas (Universidad de Berkeley)
Alumna: Norma González Jiménez
Proyecto de investigación: El acceso a la justicia para los indígenas de Oaxaca. En busca de respuestas antropológicas al sistema jurídico penal federal en el distrito judicial de Juxtlahuaca.
Director: Dr. Juan Carlos Martínez (CIESAS-Pacífico Sur, investigador huésped)
Comentaristas: Dr. Guillermo Padilla (CIESAS-Pacífico Sur) y Dra. Teresa Sierra (CIESAS-DF)
Alumno: Nicholas Justin Johnson
Proyecto de investigación: Formación de la cultura y su dinámica social: un caso contemporáneo en San Pedro y San Pablo Teposcolula.
Directora: Dra. María de los Ángeles Romero Frizzi (INAH Oaxaca)
Comentaristas: Dr. Rodrigo de la Torre (CIESAS-Pacífico Sur) y Dra. Nelly Robles (INAH-Oaxaca)
Alumna: Adriana Paola Zentella Chávez
Proyecto de investigación: El impacto del programa Oportunidades en los roles de género de las mujeres indígenas al interior del hogar. Estudio de caso en la mazateca del Papaloapan.
Directora: Dra. Paola Sesia (CIESAS-Pacífico Sur)
Comentaristas: Dra. Mercedes González de la Rocha (CIESAS-Occidente) y Dra. Josefina Aranda Bazauri (IIS-UABJO)
Alumna: Patricia Legarreta Haynes
Proyecto de investigación: Escuelas y caminos. Cambios en las relaciones intergeneracionales e interétnicas en el municipio de Valle Nacional, Oaxaca: un acercamiento.
Director: Dr. Mariano Báez (CIESAS-Golfo)
Comentaristas: Mtro. Juan Julián Caballero (CIESAS-Pacífico Sur) y Dr. Salomón Nahmad (CIESAS-Pacífico Sur)
Alumno: Xicohtencatl Gerardo Luna Ruiz
Proyecto de investigación: Colonización y cambio social en dos comunidades de la Costa Chica Oaxaqueña.
Director: Dr. Salomón Nahmad (CIESAS-Pacífico Sur)
Comentaristas: Dra. Paola Sesia (CIESAS-Pacífico Sur) y Dra. María Luisa Acevedo (INAH)
Alumno: Gonzalo Alejandro Sánchez Santiago
Proyecto de investigación: Música, arqueología y etnicidad en el sur del Istmo de Tehuantepec.
Director: Dr. Marcus Winter (INAH Oaxaca)
Comentaristas: Dr. Robert Markens
(IIS-UABJO) y Dr. Sergio Navarrete (CIESAS-Pacífico Sur)
Alumna: Karla Alejandra Montes Ramírez
Proyecto de investigación: La reorganización social como grupo: el caso de Otatitlán de Morelos, Oaxaca.
Directora: Dra. Ana Paula de Teresa (UAM-I)
Comentaristas: Dr. Juan Briseño (CIESAS-DF) y Mtro. Joaquín Figueroa (Fac. Psicología UNAM)
Alumna: Gabriela Villa Guzmán
Proyecto de investigación: Territorialidad y organización comunitaria en los Pueblos Mancomunados de la Sierra Norte de Oaxaca.
Directora: Dra. Jutta Blauert (CIESAS-Pacífico Sur)
Comentarista: Mtro. Mario Fernando Ramos Morales (Univesidad de la Sierra Juárez)

Maestría en Lingüística Indoamericana (CIESAS-CDI).

Promoción 2007-2009Coloquio de Estudiantes. Presentación de preproyectos de tesis
7, 8 y 9 de julio de 2008
CIESAS-DF



Sistema de Bibliotecas del CIESAS

Nuevas adquisiciones de la Biblioteca Ángel Palerm del CIESAS-DF.
Estados peligrosos: Oriente medio y la política exterior estadounidense/Noam Chomsky y Gilber Achcar. Barcelona: Paidós, 2007. La tradición oculta/Hannah Arendt. Barcelona: Ediciones Paidós Ibérica, 2004. El tiempo en ruinas/Marc Auge. Barcelona: Gedisa, 2003. El bien común/Noam Chomsky; David Barsamian(entrev.); Arthur Naiman (comp.), 2a. ed. México: Siglo xxi, 2002. Historia de las historias de la nación mexicana/Enrique Florescano. México: Aguilar: Taurus, 2002. La mente bien ordenada: repensar la reforma reformar el pensamiento/Edgar Morin. Barcelona: Seix Barral, 2000. En torno al guadalupanismo/Ernesto de la Torre Villar. 2a. ed. México: Miguel Ángel Porrua, 2004. Una sociedad a la deriva: entrevistas y debates (1974-1997)/Cornelius Castoriadis. Buenos Aires: Katz, 2006. Esbozo de historia de México/Juan Brom. 2a. ed. correg. y aum. México: Grijalbo, 2007. El grano de la voz: entrevistas 1962-1980/Roland Barthes. Buenos Aires: Siglo XXI, 2005. Ideología y racionalidad en la historia de las ciencias de la vida: nuevos estudios de historia y de filosofía de las ciencias/Georges Canguilhem. Buenos Aires ; Madrid: Amorrortu Editores, 2005. En busca de la Edad Media/Jacques Le Goff. Barcelona: Paidós, 2003. Culhua México: una revisión arqueo-etnohistórica del imperio de los mexica tenochca/José Fernando Robles Castellanos. México: Instituto Nacional de Antropología e Historia, 2007. Tropical Versailles: Empire, Monarchy, and the Portuguese Royal Court in Rio de Janeiro, 1808-1821/Kirsten Schultz. New York ; London: Routledge, 2001. Universidad y conocimiento/Roberto Hernandez S., Carlos Fernández C., Pilar Baptista L. México: Mcgraw Hill, 2005. Democracia y relativismo: debate con el Mauss/Cornelius. Madrid: Trotta, 2007. World Lexicon of Grammaticalization/Bernd Heine, Tania Kuteva. Cambridge, N. Y.: Cambridge University, 2002. Language Contact and Grammatical Change/Bernd Heine, Tania Kuteva. New York: Cambridge University, 2005. The Changing Languages of Europe/Bernd Heine, Tania Kuteva. New York: Cambridge University, 2006. The Genesis of Grammar: a Reconstruction/Bernd Heine, Tania Kuteva. New York: Cambridge University, 2007. The Syntax of Welsh/Robert D. Borsley, Maggie Tallerman, Davis Willis. New York: Cambridge University, 2007. Social Solidarity and the Gift/Aafke E. Komter. New York: Cambridge University, 2005. Split Auxiliary Systems: a Cross-Linguistic Perspective/Raul Aranovich (ed.). Amsterdan; Philadelphia: John Benjamins, 2007. Historical Anthropology/Saurabh Dube (ed.). New Delhi; Oxford: Oxford University, 2007. The Social Medicine Reader/Nancy M. P. King, Ronald P. Strauss, Larry R. Churchill et al. Durham; London: Duke University, 2005. Living Narrative: Creating Lives in Everyday Storytelling/Elinor Ochs y Lisa Capps. Cambridge, Ma.: Harvard University, 2001. Geographic Expressions of the Central American Isthmus: 1500-1900/Jens P. Bornholt. Guatemala: Universidad Francisco Marroquín, División Mapoteca: Fundación Uno, 2007. La idea de cultura: una mirada política sobre los conflictos culturales/Terry Eagleton. Barcelona: Paidós, 2001. Un geógrafo francés en América Latina: cuarenta años de recuerdos y reflexiones sobre México/Claude Baraillon. México: El Colegio de México, Centro de Estudios Históricos: El Colegio de Michoacán: Centro de Estudios Mexicanos y Centroamericanos, 2008. Social Research Methods: a Reader/Clive Seale (ed.). New York; London: Routledge, 2004. The Sociology of Health and Illness: a Reader/Michael Bury y Jonathan Gabe (eds.). New York ; London : Routledge, 2004. Key Concepts in Medical Sociology/Jonathan Gabe, Mike Bury y Mary Ann Elston. London; Thousand Oaks; New Delhi: Sage, 2004. Deceiving (dis)appearances: Analyzing Current Developments in European and North American Border Regions/Harlan Koff (ed.). Germany: Peter Lang, 2007. Historia de la vida cotidiana en México/Pilar Gonzalbo (dir.). Pablo Escalante Gonzalbo, Antonio Rubial García, Anne Staples (coords.). México: Fondo de Cultura Económica: El Colegio de México, 2004. The Great Divergence: China, Europe, and the Making of the Modern World Economy/Kenneth Pomeranz. Princeton, N. J.: Princeton University, 2000. Borderwork in Multicultural Australia/Bob Hodge y John O’carroll. Australia: Allen & Unwin, 2006. Saberes, culturas y derechos sexuales en Colombia/ Mara Viveros Vigota (ed.). Bogotá: Tercer Mundo: Centro Latinoamericano de Sexualidad y Derechos Humanos: Universidad Nacional de Colombia, Facultad de Ciencias Humanas, 2006. Literacies, Global and Local/ Mastin Prinsloo y Mike Baynham (eds.). Amsterdam: Philadelphia: John Benjamins, 2008. Atacama: ensayo sobre la guerra del Pacífico, 1879-1883/Claude Michel Cluny. México: Fondo de Cultura Económica, 2008. An Introduction to Corpus Linguistics/Graeme Kennedy. London; New York: Longman, 1998. Multimodal Discourse: The Modes and Media of Contemporary Communication/Gunther Kress, Theo Van Leeuwen. New York : Hodder Arnold, 2001. Handbook of Visual Analysis/Theo Van Leeuwen y Carey Jewitt (eds.). London ; Los Angeles : Sage, 2001. Social Fuzziology: Study of Fuzziness of Social Complexity/Vladimir Dimitrov, Bob Hodge. New York: Physica-Verlag, 2002. Medicine and the Body/Simon J. Williams. London; New Delhi: Sage, 2003. Cartografía hidráulica de Guanajuato/Martín Sánchez Rodríguez y Herbert H. Eling (coords.). Zamora, Michoacán: El Colegio de Michoacán: Consejo de Ciencia y Tecnología del Estado de Guanajuato, 2007. Contentious Lives: Two Argentine Women, Two Protests, and the Quest for Recognition/Javier Auyero. Durham : Duke University, 2003. Pensar (en) género: teoría y práctica para nuevas cartografías del cuerpo/Carmen Millán de Benavides y Ángela María Estrada Mesa (eds.). Bogotá: Pontificia Universidad Javeriana, 2004. Introducing Social Semiotics/Theo Van Leeuwen. New York; London: Routledge, 2005. Literacy in the New Media Age/Gunther Kress. New York; London: Routledge, 2003. Visual Culture: The Reader/Jessica Evans y Stuart Hall (eds.). London: Sage, 1999. The Reflexive Nature of Consciousness/Greg Janzen. Amsterdam; Philadelphia: John Benjamins, 2008.

Convocatoria

Convocatoria
Segundo concurso de fotografía
del Fondo de Población de las Naciones Unidas en México
Mirada Joven
El Fondo de Población de las Naciones Unidas en México (UNFPA,) invita a las y los fotógrafos aficionados y profesionales que tengan entre diez y treinta y cinco años de edad, mexicanos y extranjeros residentes en México, así como jóvenes con nacionalidad mexicana que vivan en el exterior a participar en el Segundo Concurso de Fotografía del Fondo de Población de las Naciones Unidas en México titulado Mirada Joven con el tema:

Culturas Juveniles
¿Cómo vivo mi juventud?
¿Qué propongo para construir una cultura de respeto?
En México habitan actualmente cuarenta millones de jóvenes que constituyen una población heterogénea en donde coexisten múltiples grupos juveniles, caracterizados por una gran diversidad de formas de vida y expresiones culturales. Esta coexistencia, que debe darse en un marco de respeto a los derechos humanos fundamentales, es la garantía para conocernos, respetarnos, expresarnos y coincidir en objetivos comunes de desarrollo social más amplios.

Categorías
Puedes participar en una, dos, tres o cuatro de las siguientes categorías:

IMAGEN Y/O SERIE: fotografías tomadas con cámara análoga (negativo o diapositiva), digital, en b/n o color.
IMAGEN Y/O SERIE CELULAR: fotografías tomadas con teléfono celular o cámara digital de baja resolución.
Recepción de obra: del 14 de agosto al 30 de septiembre de 2008.
Premiación y exposición en el Palacio de Minería de la Ciudad de México: 13 de noviembre.
Las fotografías participantes que sean recibidas por internet o bien vengan acompañadas con un respaldo digital, serán exhibidas en la Galería del portal del concurso: www.mexicomiradajoven.com, donde el público interesado podrá conocer las obras recibidas y participar en el Premio del Público, que será otorgado a la fotografía que reciba mayor cantidad de visitas del 14 de agosto al 10 de noviembre de 2008.
Para conocer las bases del concurso y obtener más información sobre premios, instituciones y empresas auspiciantes, ceremonia de premiación y exposición itinerante, visita:
www.mexicomiradajoven.com
¡Contamos con tu mirada!
Concurso de fotografía
del Fondo de Población de las Naciones Unidas en México
Mirada Joven
Homero núm. 806 esq. Eugenio Sue
Col. Polanco Del. Miguel Hidalgo
México, D. F., C. P. 11550
Teléfono: (55) 5250-7977 / 7092 / 7749
mexicomiradajoven@gmail.com

Agenda Académica

Miércoles 6
Sesión del Seminario de la Cultura Mixteca
Coord. Manuel Hermann Lejarazu (CIESAS-DF)
hermann@ciesas.edu.mx
Sede: CIESAS-DF, Sala 4
Juárez 87, Tlalpan, DF
11:00 h
Miércoles 13
Sesión del Seminario de la Cultura Mixteca
Coord. Manuel Hermann Lejarazu (CIESAS-DF)
hermann@ciesas.edu.mx
Tema: El mapa de Santo Tomás de Ocotepec
Ponente: Itzel González (Maestría en Estudios Mesoamericanos-UNAM)
Sede: CIESAS-DF, Sala 4
Juárez 87, Col. Tlalpan, DF
11:00 h
Miércoles 13
Sesión de la Red de Estudios Sociales sobre el Medio Ambiente (RESMA)
Seminario interinstitucional
Coord: Roberto Melville (CIESAS-DF)
melville.ciesas@yahoo.com
Sala 3 (con videoconferencia con CIESAS-Occidente y Colegio de San Luis)
Juárez 222, Tlalpan, DF
11:00 h
Miércoles 20
Sesión del Seminario Permanente de Antropología Médica (seminario cerrado)
Coord. Eduardo Menéndez (CIESAS-DF)
elmenpin@ciesas.edu.mx
Tema: El estrés entre un grupo de operadoras telefónicas. Relatos, síntomas y ausencia de diagnóstico.
Ponente: Josefina Ramírez Velázquez (Posgrado en Antropología Física ENAH- INAH)
Sede: CIESAS-DF, Sala: 1
Juárez 87, Tlalpan
10:00 h
Miércoles 20
XXIV Reunión del Comité Interinstitucional de Clásicos y Contemporáneos en Antropología
Coord: Roberto Melville (CIESAS-DF)
melville.ciesas@yahoo.com
Sala de la Dirección General
Juárez 87, Tlalpan, DF
17:00 h
Martes 26 y miércoles 27
Coloquio de Historia y Arqueología de la Mixteca.
Coord. Manuel Hermann Lejarazu (CIESAS-DF)
hermann@ciesas.edu.mx
Váse programa en Ichan Tecolotl núm. 215, julio de 2008.
www.ciesas.edu.mx
Sede: CIESAS-DF, Auditorio
Juárez 222, Tlalpan
11:00 h
Viernes 27
Sesión del Seminario Permanente enah-ciesas
Coord. Sergio Sánchez (CIESAS-DF)
sads542@yahoo.com.mx
Violencia en el Trabajo (sesión abierta)
Discusión de avances de investigación: ¿Mobbing, bullying o qué? Cuando sin relación laboral se linchan alumnos, de Arturo Luis Alonzo Padilla; y Acoso moral y violencia en las maquiladoras de exportación (El caso de Ciudad Juárez, Chihuahua), de Patricia Ravelo y Sergio Sánchez
Sede: ENAH
9:00 h
Viernes 29
Sesión del Seminario de la Red Análisis de Discurso
Coords. Eva Salgado (CIESAS-DF)
corsal@prodigy.net.mx y
Teresa Carbó (CIESAS-DF) tcarbo@ciesas.edu.mx
Sede: CIESAS-DF, Sala 4
Juárez 87, Tlalpan, DF
10:00 h
Viernes 29
Sesión del Seminario de Vulnerabilidad Social a Desastres
Coord. Jesús Manuel Macías (CIESAS-DF)
macserr@att.net.mx
Sede: CIESAS-DF, Auditorio
Juárez 222, Tlalpan, DF
10:00 h

Número 215. Año 18, julio 08


Editorial.
Un diagnóstico social las obras mayores de infraestructura hidráulica: la subcuenca del río Moctezuma (Hidalgo y Querétaro. Para las políticas públicas y de modernidad, ligadas a una visión del progreso, que se llevaron a cabo en las últimas décadas del siglo XX...
Puntos de Encuentro
Ciencia en Yucatán. Con la participación de científicos e investigadores de diversas instituciones de educación superior y centros de investigación, en coordinación con el sector empresarial de Yucatán
CIESAS-Universidad De Texas Austin.
Firma de renovación de convenio de colaboración
Aniversario del CIESAS
Coloquio de Historia y Arquelogía de la Mixteca
En el marco del 35 aniversario del CIESAS, el Seminario de Cultura Mixteca invita a los interesados a participar en el Coloquio de Historia y Arqueología de la Mixteca, que tendrá lugar los días 26 y 27 de agosto.
Docencia.
* Alumnos aceptados a los programas que inician en septiembre de 2008
* Maestría en Antropología Social (CIESAS-DF)
* La Voz de los Esutiantes
REvistas
American EthnologistVol. 16, núm. 2, mayo de 1989, pp. 335-349 http://www.jstor.org/stable/645006
Hace 200 años
Julio de 1808, en efecto, es clave en la ruta de Iberoamérica hacia la independencia. La abdicación de Carlos IV a favor de su hijo Fernando VII no provocó gran conmoción, pues era parte de las rutinas hereditarias de las coronas europeas.
Cinemantropos
Locos por el baile (Mad Hot Ballroom, EUA, 2005)
Sistema de Bibliotecas del CIESAS
Nuevas adquisiciones de la Biblioteca de la Unidad Pacifico Sur
Publicaciones del CIESAS
Novedades Editoriales
Agenda Académica

Editorial. Un diagnóstico social las obras mayores de infraestructura hidráulica: la subcuenca del río Moctezuma (Hidalgo y Querétaro)

Para las políticas públicas y de modernidad, ligadas a una visión del progreso, que se llevaron a cabo en las últimas décadas del siglo XX y los primeros años del siglo XXI las represas hidroeléctricas tienen un rol importante en el desarrollo de las cuencas hídricas, particularmente porque son “faros” del desarrollo económico y del progreso científico modernos por la producción eléctrica y otros usos; sin embargo, dichas represas podrían impedir el desarrollo sustentable si sus impactos ambientales y sociales no son considerados y controlados antes del inicio, durante, al final y después del desenvolvimiento de los proyectos hidroeléctricos.
Debido a la construcción de las represas o presas se fragmentan los ecosistemas fluviales, aislando a las comunidades bióticas de las cuencas altas de las que habitan en las zonas medias y bajas, se interrumpen las migraciones y los movimientos de las especies y se separa al río de sus planicies y litorales; en términos sociales se crean expectativas, que en ocasiones no se cumplen, y se ocasionan conflictos internos en las localidades, acentuando los malestares sociales existentes en las regiones donde se ubican dichos proyectos. Estos efectos los debemos tomar en consideración y evaluarlos en toda su cabalidad, analizando los impactos previos, así como a corto, mediano y largo plazo de un desarrollo en curso, porque es siempre más fácil y más barato prevenir la degradación ambiental que tratar de repararla, así como crear nuevas formas y modelos de desarrollo horizontales que superen los establecidos desde hace décadas, traducidos en expropiar e indemnizar. En el aspecto social, pueden existir rezagos sociales e históricos que se convierten en banderas de lucha por parte de los habitantes, así como factores externos que sirven de detonantes en un espacio social que contenga serias carencias hidrológicas, orográficas, culturales y económicas, así como de representatividad política. Estos aspectos pueden intervenir de manera directa en la aprobación o no, por parte de los habitantes, de un proyecto de desarrollo, lo que en muchos casos lleva a enfrentamientos con las agencias federales que promueven este tipo de proyectos y a una resistencia civil que aglutina variados niveles de quejas y malestar.
En la planeación de un proyecto de desarrollo hidroeléctrico puede determinarse si se van a repavimentar, ampliar o abrir caminos, hacer túneles, tirar casas, modificar el ecosistema, cómo indemnizar a los habitantes, etc., aun cuando básicamente se esté considerando la construcción de la presa y no forzosamente todos los aspectos colaterales, que en muchos casos pueden impactar más que las obras en sí. Ésta puede ser la perspectiva técnica porque son cosas que se pueden observar y medir. Sin embargo, es importante definir las áreas de involucramiento de acuerdo con lo que los habitantes piensan y perciben que son los problemas y luego negociar soluciones que sean adecuadas (en ambos casos, no desde la perspectiva del promotor y ejecutor del proyecto). Es necesario y primordial definir las áreas de involucramiento no solamente en términos técnicos sino sociales –que en varios casos no coincidirán–, lo que se puede elaborar y ejecutar por medio de un cruce de intereses y no solamente con una especie de prevención y monitoreo social paliativo; es decir, a través de diagnósticos y evaluaciones sociales que permitirán concretar muchas de las expectativas que pueden llegar a tener los habitantes de una zona en que se llevará a cabo un proyecto de desarrollo. La perspectiva no debe de ser solamente técnica en el sentido de que se puede lograr a través de la observación y medición, sino que tiene que establecerse mediante el análisis de los significados y los valores que los posibles involucrados atribuyan a los distintos elementos de su vida cotidiana, es decir, es más bien una forma negociada de establecer las necesidades, los requerimientos y las formas de mitigación. Sin duda, lo más inmediato y quizá lo que se observa de manera más tangible es la solicitud de mejoramiento de caminos, luz, agua, escuelas y clínicas; pero esto solamente reflejaría lo inmediato más no lo mediato y a largo plazo, sobre todo cuando en algunos casos las escuelas no cuentan con maestros o las clínicas con médicos. Aquí debemos de considerar que aun cuando un proyecto y sus ejecutores tengan una visión homogénea del proceso, así como de sus diversas etapas, para los pobladores el impacto es diferenciado, ya que cada una de las localidades, así como sus individuos, lo perciben de manera diferente y con diversos grados de intensidad, lo que puede llevar a un choque de visiones y perspectivas, donde una se impondrá de manera avasalladora frente a lo que podría convertirse en una resistencia pasiva o activa de los pobladores.
En el actual sexenio del presidente Felipe Calderón la consolidación y expansión de la infraestructura eléctrica ha motivado una importante inversión en diversos estados de la República. Sin embargo, en este proceso y frente a las políticas internacionales que han impulsado la utilización de los llamados recursos renovables, el gobierno mexicano ha considerado que el agua es un elemento de seguridad nacional, no solamente para su captación en presas, sino para el abastecimiento de ciudades y del campo mexicano, aspecto que ya había resaltado el gobierno de Vicente Fox, junto con la necesidad de organizar los sistemas de cuenca y ordenar a los diversos organismos que se encuentran involucrados en la gestión del recurso hídrico. De esta manera el tema “agua” con sus diversas variantes se ha encontrado en los diversos discursos y políticas de desarrollo, siendo un elemento central en las definiciones estatales de apoyo, inversión y producción tecnológica, así como su consideración, además de la migración, dentro de las líneas estratégicas del Sistema de Centros Públicos de Investigación del Conacyt, al que pertenece el CIESAS.
La Comisión Federal de Electricidad (CFE), empresa federal que genera, transmite, distribuye y comercializa energía eléctrica en México, y con base tanto en lo proyectado por el gobierno federal como en las políticas y planes de desarrollo establecidos desde hace varias décadas, ha armado un sistema de generación y distribución de energía eléctrica basado en plantas que utilizan carbón, agua, petróleo o una combinación de cualquiera de las tres fuentes de energía, así como la construcción de presas que contengan la suficiente agua para la generación de electricidad. Aunque el crecimiento de la capacidad de generación del Sistema Eléctrico Nacional (SEN) se ha centrado en la utilización de hidrocarburos, la capacidad adicional requerida se obtendrá de la combinación de las tecnologías de generación disponibles; esto se debe a razones técnicas y ambientales que responden a las políticas ambientalistas, así como a los ordenamientos del Banco Mundial, del Banco Interamericano de Desarrollo, así como a de la Comisión Internacional de Represas.
No debemos olvidar que existe un escenario nacional e internacional que contiene una demanda creciente de agua y energía. El SEN en México ha incorporado de manera decisiva, a partir de 2000 –cuando se modificó el marco jurídico que lo regía– la participación de productores independientes de energía (PIE) a través de dos procesos identificados como: autoabastecimiento y cogeneración, particularmente por medio de la tecnología de ciclo combinado. Así, en tan sólo seis años –de 2000 a 2006– una cuarta parte de la energía generada en México estuvo a cargo de los pie. En el escenario de planeación de la CFE a 2017, uno de los elementos más destacados es el cambio tecnológico. Se ha programado una disminución de la tecnología termoeléctrica convencional, cuya capacidad instalada en 2006 representó 26.4%, a 10.9% en 2017; y, en contraparte, la tecnología de ciclo combinado, en la que destacan los PIE, tendrá un gran dinamismo, pues de la cuarta parte que representó su participación en 2006, pasará a 38.8% en 2017.
En tanto, la hidroelectricidad continuará representado una quinta parte de la capacidad instalada del SEN, en un contexto de crecimiento promedio del sector eléctrico de alrededor de 4% anual, durante los próximos diez años. Esto significa que la construcción de centrales hidroeléctricas y las presas a las que están asociadas en la mayoría de los casos, continuará aumentando. En este sentido, México intentará cumplir con la meta global de generar no menos de 19% de su energía a partir del uso no consuntivo del agua en centrales hidroeléctricas.
De esta manera, la cfe ha considerado la construcción del Sistema de Energía Renovable Moctezuma (SERM), ubicado entre los estados de Hidalgo y Querétaro, el cual aportará al sistema eléctrico nacional una capacidad de 114 gw para obtener una generación hidroeléctrica media anual de 849.4  gw / h, mediante el aprovechamiento complementario de un río ya controlado, como es el caso del Moctezuma.
El río Moctezuma (límite geográfico de los estados de Querétaro e Hidalgo) se forma por la confluencia de los ríos Tula y San Juan, aguas abajo se le une por la margen izquierda el río Extoraz y a la altura de Tamazunchale, San Luis Potosí, confluye el río Amajac por la margen derecha. El río continúa con el nombre de Moctezuma hasta la confluencia con el río Tampaón, tomando el nombre de río Pánuco hasta su desembocadura en el golfo de México. A esto habría que agregarle que ambos lados del río pertenecen a lo que se conoce como la Sierra Gorda, lo que permite considerarlo como un espacio en que sus habitantes comparten ciertos rasgos y relaciones diversas. De esta manera no solamente se toma en cuenta un nivel de regionalización a partir de la subcuenca del Moctezuma (perteneciente a la cuenca del Pánuco-Moctezuma), sino también se considera un sistema orográfico donde se desarrollarán los proyectos con otras características, superando en mucho la sola relación de los habitantes con el río, cuando ésta se da.
La región hidrológica del Pánuco comprende, además de la cuenca del río Pánuco y sus tributarios, la totalidad de la cuenca cerrada del Valle de México. Colinda con cinco regiones hidrológicas: al sureste con la RH 27 Norte de Veracruz, al sur con la RH 18 Balsas, al oeste con la RH 12 Lerma-Santiago, al norte con la RH 37 Salado y, al norte y noreste con la RH 25 San Fernando-Soto La Marina. Al este, en su desembocadura al Golfo de México, el río Pánuco se abre paso a través de un estrecho corredor por el que logra alcanzar el mar, dejando atrás un conglomerado de lagunas que hacen de su desembocadura un ecosistema diverso y particular.
La cuenca del río Pánuco representa 16% de la superficie total de las catorce cuencas fluviales de la vertiente del golfo de México; es la segunda por su extensión, y ligeramente más extensa que la cuenca del Grijalva-Usumacinta (83 533 km2); únicamente superada por la cuenca del río Bravo, que es la mayor, con una extensión equivalente a 42% (226 280 km2) de la extensión total de la vertiente. En cuanto su longitud, el río Bravo es el mayor con 2 018 km, el Grijalva-Usumacinta con 1 521 kilómetros, y el río Pánuco, con sus 510 kilómetros tiene una longitud semejante a una tercera parte de la del Grijalva-Usumacinta, si bien con una extensión equivalente. El mayor contraste entre estos tres sistemas fluviales se manifiesta en el volumen del escurrimiento natural medio superficial, ya que mientras el del sureste tiene que conducir un volumen de 115 536 hm3/año que representa 46% del total del caudal y, con mucho, el mayor de la vertiente del golfo; el Pánuco moviliza 20 330 hm3/año, equivalente a 8%, el cuarto de esta vertiente en cuanto al volumen que desplaza; y al que delimita la frontera norte internacional, corresponde un escurrimiento de 5 588 hm3 / año, equivalente a 2% y séptimo, en cuanto al volumen que desplaza.
La importancia de la cuenca se remonta al periodo colonial cuando en el Valle de México se comenzaron a realizar las obras de desagüe del Huehuetoca; posteriormente se convirtió en el punto de desagüe de las aguas negras de la ciudad de México hacia el golfo de México a la altura del puerto de Tampico; su recorrido fue utilizado para la agricultura, y en la actualidad algunas de las industrias ubicadas en su trayecto vierten algunos de sus desechos en él.
Durante los años coloniales y decimonónicos, sus aguas sirvieron para mantener los cultivos y a los habitantes de sus márgenes, principalmente de la zona del Mezquital en el actual estado de Hidalgo. Frente a la modernización que comenzaba a desarrollarse en el país a fines del siglo xix y a la mejora en la tecnología, la corriente del Moctezuma comenzó a interesar para aspectos que iban más allá de la agricultura. Diversos y variados actores sociales comenzaron a percibir que el volumen de agua que llevaba el río en su cauce, podría ser utilizado para algo más que solamente saciar la sed de las simientes, por lo que a principios del siglo XX, algunos usuarios comenzaron a solicitar a la Secretaría de Fomento una serie de autorizaciones con el fin de obtener derechos para la utilización del líquido para generar electricidad a través de obras hidráulicas, muchas de las cuales no se pudieron concretar; sin embargo, la importancia del río como posible generador de energía eléctrica ha estado presente en los actores sociales del pasado y del presente.
Después de la Revolución de 1910, el río Moctezuma fue declarado por parte del gobierno federal como propiedad de la nación, el 29 de marzo de 1919, con base en lo que se consideraba en el artículo 27 de la Constitución de 1917, en el sentido de que si una corriente servía de límites entre dos entidades federativas, éste pertenecía a la nación, aspecto que se tomaba de una ley porfirista (1888). De esta manera se consideraba al Moctezuma como una corriente perenne que se formaba de la unión de los ríos de San Juan del Río y del Tula, la cual se daba en el lugar llamado “Infiernillo” del Distrito de Zimapán, Hidalgo. El río cambia de nombre por el de Pánuco en Tamuín, San Luis Potosí.
En 1929, Walter E. Packard, manifestó ante la Secretaría de Agricultura y Fomento el deseo de obtener una concesión para aprovechar un volumen anual de cinco mil milloes de metros cúbicos, de las aguas del río Moctezuma para generación de fuerza motriz. En el mismo documento se menciona que se pretendían hacer las obras de derivación de las aguas en los distritos o municipalidades de Zimapán, Tecozautla, La Misión y Pacula del estado de Hidalgo, así como los de Cadereyta y Jalpan del estado de Querétaro. Sin embargo, la concesión no fue autorizada debido a que existía una veda en las corrientes del Moctezuma.
El análisis del potencial hidroeléctrico del río Moctezuma ha requerido de una planeación que incluye estudios técnicos, ambientales y sociales para determinar la factibilidad de los proyectos; en cuanto a lo correspondiente al aspecto social, el ciesas elaboró un diagnóstico social con el fin de poner sobre el tamiz la manera en que las diversas localidades y sus habitantes observan y perciben los proyectos que plantea la cfe, así como las posibles implicaciones y expectativas que se han generado considerando principalmente a los involucrados de una u otra manera. En este proyecto colaboraron investigadores de la Universidad Autónoma de Querétaro (Alberto García Espejel), de la Universidad Autónoma del estado de Hidalgo (Sócrates López), de El Colegio de Michoacán (Martín Sánchez Rodríguez) y de El Colegio de San Luis (Lydia Torre), quienes en conjunción y coordinando a estudiantes, asistentes de investigación e investigadores permitió la elaboración de encuestas, entrevistas y levantamiento de datos etnográficos a través de trabajos de campo, así como recorridos en diversas zonas que no se consideraban directamente involucradas. De esta manera, se fue conformando y definiendo un Sistema Social Regional que permitiera entender por medio de datos estadísticos y de campo, así como por medio de la elaboración de un Sistema de Información Geográfica, la manera en que los habitantes de casi treinta y cinco localidades (de ochenta y cinco consideradas por la CFE) percibían la construcción de tres presas en cadena (en febrero de este año se modificó a dos y un túnel de 20 km), así como la ampliación de caminos, asentamientos de obreros en campamentos, túneles, tendido de vías eléctricas, etcétera.
Para analizar la zona que consideraba la cfe, se delimitaron tres ámbitos: el ámbito estatal, que se refiere al espacio socioeconómico que ocupan los estados de Querétaro e Hidalgo; el ámbito municipal, conformado por los municipios de Cadereyta, San Joaquín, Jalpan de Serra, Landa de Matamoros, Querétaro; Zimapán, Pacula, Jacala de Ledesma, La Misión, Chapulhuacan y Pisaflores, Hidalgo. El ámbito local corresponde a las localidades ubicadas en el Sistema Social Regional y aquellas que se incorporarán al tener una influencia por el desarrollo del proyecto. Asimismo, dentro de estos ámbitos se consideró que estas zonas son fuertes expulsoras de población –gran parte de ella hacia Estados Unidos, ciudades fronterizas o puertos, así como a la ciudad de México–, además del papel que la mujer tiene en la toma de decisiones locales y regionales, así como de gestoras de recursos.
El resultado de ocho meses de trabajo permitió mostrar la manera en que el Sistema Social Regional identifica el funcionamiento de instituciones así como preguntarse por el papel que desempeñan en el entramado regional, independientemente de su categoría CENSAL o de su jerarquía en los gobiernos locales. Se trata más de preguntarse por el funcionamiento del sistema y sus actores, que por su organización formal.
El Sistema Social Regional del serm es un campo social abierto, compuesto con elementos heterogéneos (recursos materiales, información, tecnología, componentes institucionales, discursos, así como conjuntos de relaciones sociales de diversos tipos), con una distribución también heterogénea, en la que no prevalece un principio ordenador único. Aunque el patrón de relaciones sociales y la existencia y distribución de recursos permiten ciertas posibilidades organizativas, cualquier orden que emerge de un campo social es el resultado de luchas, negociaciones y acomodos entre grupos en competencia, donde es más probable localizar discontinuidades sociales como resultado de discrepancias de valores, intereses, conocimiento y poder a través del tiempo. En el Sistema Social Regional, cada una de las comunidades es parte integrante de la red de relaciones que las ligan entre sí y con un centro regional o subregional. Los centros regionales son más que la mera sede de las autoridades políticas, judiciales y administrativas. Estos centros facilitan muchas clases de servicios a su región de influencia, tales como comunicaciones (correos, telégrafo, teléfono) y transportes (pasajeros y carga); el comercio se centra en ellos, así como las sucursales bancarias, los sistemas de crédito público y privado, los servicios médicos y hospitalarios, y aun los de carácter religioso; ahí se encuentran también otros especialistas y profesionales, obreros y artesanos que sirven a muchas localidades; además constituyen lugares que ofrecen empleos y oportunidades a la población del área; tienen lugares de diversión y entretenimiento; y las escuelas públicas y privadas ofrecen sistemas de organización completa y niveles medio superior y superior de educación.
Así, que lo que se construyó en este proyecto y se entregó a la cfe, fue una serie de elementos que permiten entender la manera en que se perciben, por parte de los habitantes, las obras de infraestructura hidráulica, creando las herramientas para el análisis y la toma de decisiones de políticas públicas.
Dr. Antonio Escobar Ohmstede
Investigador del CIESAS-DF
Coordinador general del proyecto
ohmstede@ciesas.edu.mx